Por KeYa
Superando el mal de Diógenes.
Alguna vez leí que es una costumbre japonesa hacer unas limpiezas/orden (buscaré el archivo para un post más adelante), y eso les permite vivir mejor.
Aprovechando la primavera, podemos hacer una limpieza de nuestra casa para esta nueva temporada, el tiempo es ideal.
Desde hace algunos años atrás he tratado de juntar menos cosas y evitar el consumismo, eso significa también pensar dos veces antes de comprar cualquier cosa, desde un esmalte de uñas hasta una polera, y pensar ¿realmente lo necesito? Y también de intentar que cada vez que compro algo nuevo, me tengo que deshacer de algo antiguo. Todavía estoy en ese proceso, pero me ha ayudado bastante.
Esta lista funciona así:
1) Los
ítem van a ir a: su lugar donde quedarán si las mantenemos, una bolsa para
regalar, una bolsa para reciclar y finalmente una bolsa de basura.
2) Si
te hace feliz, se queda. Si no, se va.
3) Si
te hace feliz, tiene valor emocional, pero crees que te deberías deshacer de
ello, sácale una foto y envíatela a tu mail para tenerlo de recuerdo
(tarjetas de cumpleaños, entradas al cine, a conciertos, etc…)
Los primeros 20 de la lista.
1) Cajas
de electrodomésticos / electrónica.
Una caja firme se puede reutilizar para organizar otras cosas, pero si no le encuentras automáticamente un uso se tiene que ir al reciclaje de cartones.
2) Maquillaje
vencido (la regla genérica es: si no te acuerdas cuándo lo compraste, es tiempo
de botarlo. Da lo mismo que sea MAC)
3) Revistas
viejas.
4) Ropa
interior que no usas (un par como último recurso es suficiente)
5) Boletas,
documentos innecesarios con más de dos años de antigüedad (si tienes dudas,
sácale una foto o escanea).
6) Calcetines
huachos que en más de dos meses no encontraron su par. Calcetines con hoyos
también.
7) Libros
que nunca leíste o que nunca volverás a leer.
8) Tecnología
obsoleta (vhs, cd players, celulares…)
9) Velas usadas que ya no tienen mecha.
10) Menús de comida a domicilio que nunca pides.
11) Remedios / vitaminas vencidos.
12) Zapatillas viejas.
13) Especias viejas (esas bolsitas de aliño
completo de hace dos años que tienes en un cajón).
14) Videojuegos que nunca ocupas.
15) Esmaltes de uñas secos.
Los intentas usar y queda una capa tan gruesa que no se seca nunca en tu uña. A no ser que realmente vayas a hacer un proyecto tipo Pinterest con ellos, en menos de dos semanas, es tiempo que vayan a la basura.
16) Joyas que no usas.
17) Comida vencida que tienes en el refri
Acabo
de botar unas aceitunas de un frasco de hace mucho tiempo, ya casi tenían vida propia. Agarra valentía, respira
por la boca, bota lo del interior y lava el frasco de vidrio para llevarlo a
reciclaje.
18) Perfumes que no usas.
19) Objetos de decoración que tienes guardados.
20) Toallas viejas y tiesas (pregúntale a alguien
con mascota si le sirven).
Basado en: Embracing homemaking
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